Perdiendo los almuerzos dominicales

Uno conserva recuerdos que le hacen sentir el corazón ensanchado, a menudo cosas relacionados a la niñez, memorias vagas que mantenemos y que al pasar del tiempo olvidamos. 

Y un día como una brisa repentina, vuelven y nos tocan. Yo no puedo obviar muchas situaciones con la familia que tengo, desde pequeño me sentí diferente, feliz e incómodo a la vez. Pero siempre tuve en mente que estas situaciones me harían falta, posiblemente por el hábito, pero me hacen respirar profundo y sentir ese sentimiento extraño en el estómago. Ojala pudiera describirlo de mejor manera...

Recuerdo que a pesar de no tenerlo todo, los domingos por las mañanas desayunábamos juntos, después de que los que iban a la iglesia regresaban. Adormitado y en fachas, en la mesa con mi familia, nos sentabamos los cinco a comer, no recuerdo a mis padres mas jóvenes, no recuerdo a mis hermanos siendo más jóvenes tampoco, sin embargo me recuerdo, un niño pequeño un poco afeminado, pero rodeado de su familia, posiblemente disfuncional desde ese tiempo, pero siempre me sentí protegido y me duele que las cosas cambien. 

Justamente pensé en eso, mientras caminaba por el callejón que tanto he usado para ir al trabajo, o a los trabajos que he tenido, para salir a la universidad y tomar el bus.

¿Qué soy? ¿Solamente viviré esta vez? Todos mis recuerdos se perderán, y esta nostalgia que siento, que he sentido, ¿Solo se irá?

Junto con esto he pensado en todas las fotografías que he perdido, que he  tomado y valorado de forma ingenua, no con mala intención de infravalorarlas, sino disfrutarlas en el momento y dejarlas ir. Supongo que es por el síndrome de poco esfuerzo que me auto diagnostique. 

Siempre pienso en las mismas situaciones y como pude reaccionar, pero también considero mis ideales y me hacen sentir mejor, Que las cosas pasan de una forma por una razón, no Dios necesariamente. 

Soy el tipo de persona que tiene miedo del futuro, supongo que es el defecto de no planear o de planificar pobremente. Dependo mucho de mis seres queridos, mucho. Siento que la ventaja de verme vulnerable y casi dar lastima me ha ayudado muchas veces a salir de situaciones terribles. 

Y como me llego a sentir como un extraño en lugares a los que suelo ir pero que me hacen sentir tan solitario incluso cuando estoy rodeado de gente. Y esta bien, ser vulnerable no me molesta, es una bendicion, porque incluso la reacción mas minima me hace sentir terrible, pero me hace sentir y lo agradezco. 

Estoy entre dejar de perder momentos que comparto con la gente que amo, pero que también me desespera, a seguir de fatalista diciendo que moriré y nada importara. Creo que el tiempo enseña lecciones y hechos terriblemente reales, grandes autores han dejado pruebas de su trabajo, de que existieron y que tambien tenian miedo.

Ahora las personas de mi edad solo se preocupan por verse bien de permanecer "relevantes", en cualquier red social. Umberto Eco no estaba tan mal al decir que se le dio el poder de opinar al idiota en esta época. Me considero uno de esos idiotas, tengo más desaciertos que aciertos. Obviamente solo puedo mencionar esto desde mi experiencia. 

Me mantengo en la vida que tiene altas y bajas, que nunca está estable, a mi familia le preocupa, y a mi me preocupa que les preocupe, creo que algunas veces han sentido un poco de rechazo y desprecio de mi parte, y lo mismo de ellos hacia a mi. Por la actitud cínica que de alguna forma construi.

Cínica e hipócrita, porque cuando me hieren regresó rápidamente a buscar refugio. Cuando llueve quiero estar solo y con ellos en el mismo sitio. 

Tengo mucho miedo, la incertidumbre siempre está ahí junto a mi. Siendo cuestión de tiempo prefiero ser paciente, mantener el ritmo, dejar de soñar que despierto. 

Me siento feliz con lo que pasa a mi alrededor últimamente, pero extraño cosas que antes no valore. Supongo que asi funciona y funcionara siempre. No se puede obligar al tiempo y a la vida a permanecer de un solo modo.

No me asusta ser yo, pero siento que puedo herir y destruir sentimientos bien intencionados hacia mi. 

He conocido mucha gente, y me alegra el viaje. Y prefiero seguir a mi modo sin medirse sin pretender, pero siempre con el defecto de querer sobresalir y ser superior. Supongo que es algo que la humanidad ha arrastrado y aún vive en mi.

Me molestan muchas cosas dentro de mi, pero a la vez agradezco de tenerlas. Supongo que me siento más cómodo en el caos. 

A veces quisiera hundirme en el océano y encontrar la catedral de la que habla Florence Welch y poder reclinar la cabeza, dejar que mi cuerpo descienda y que mi espíritu ascienda. No rendirme, solo ceder. 







"Dream I'm awake and you wish you were sleeping, He's the kind that keeps his windows open talk to him, I might fall in love breaks through gold"

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