Se acabó verdad?
Gane muchas batallas... pero perdi la guerra. Estoy una vez más sentado aquí tratando de no llorar esperando a sentirme un poco mejor después de desahogar una vez más la pena, la pena y el dolor que supe desde el principio se reunirán en mi habitación a contemplarme y verme con lastima por saber las consecuencias. Los últimos meses mi pecho me advirtió que la incertidumbre y la tristeza eran inminentes, el miedo a estar solo el miedo a perder la costumbre me hicieron continuar, su mar de buenas intenciones se convirtió en una tormenta de mentiras y los mismo viejos hábitos terminaron ahogandome y dejándome arrastrar hasta el fondo oscuro en el que me siento en este momento. El clima tan insultantemente agradable, casi sarcástico me hace sentir peor, ¿Qué está pasando? Las frases tan hipócritas resuenan en mi cabeza, "Espero que algun dia encuentres la bendición del amor de Dios en tu vida", maldito hijo de puta. No sé a donde ir, a quien recurrir, con quien desahogar mi...